Hay varias maneras para optimizar el consumo de energía eléctrica.
A continuación te compartimos algunos tips de ahorro que van a reflejarse en una disminución del importe de tu factura de UTE.
Iluminación
- Cambiá las lámparas incandescentes por lámparas eficientes.
- Siempre que sea posible, aprovechá la iluminación de la luz solar.
- Apagá las luces de las habitaciones cuando no las necesites encendidas.
- Utiliza fotocélulas para prender y apagar luces de exteriores, así como de estacionamientos.
Termotanque
- Sumale un timer para que se encienda un par de horas antes de bañarte y que se apague luego del último uso.
- Regulá el termostato a 60°C. De este modo, se reducirán las pérdidas de calor y aumentará la duración del equipo.
- Instalá el termotanque próximo a los lugares donde se va a utilizar el agua caliente, reducirás las pérdidas de calor en las cañerías.
- Con la utilización de ducheros eficientes, podrás disfrutar del mismo confort a la hora de la ducha, pero consumiendo menores cantidades de agua caliente.
Heladera
- Controlá que la puerta cierre bien, y que los burletes se encuentren en buen estado.
- Dejá enfriar los alimentos antes de guardarlos.
- Abrila sólo cuando sea necesario, y durante el menor tiempo posible.
- En caso de freezer, o heladera sin descongelado automático, evitá la acumulación de hielo. Esto hace trabajar más el equipo, implicando un mayor consumo de energía.
- La temperatura ideal del refrigerador está entre 3°C y 5°C, y del congelador en -15° C. Tené en cuenta que cada grado que reduzca la temperatura interior aumentará innecesariamente un 5% el consumo de energía.
Acondicionamiento térmico
- Elegí preferentemente aires acondicionados con Etiquetado de eficiencia energética Clase A.
- Limpiá los filtros de los A/A al comienzo de cada temporada (verano e invierno), o sea al menos dos veces en el año. Esto disminuye el consumo de energía del equipo y además evita que ingrese aire con polvo en la habitación.
- Es recomendable utilizar aires acondicionados inverter, principalmente en ambientes donde el equipo está muchas horas funcionando.
- Durante el invierno regula el A/A a 21°C y durante el verano a 24°C. Recordá que cada grado que aumentás en invierno o disminuís en verano, significa un incremento del consumo en un 5%. Además, utilizarlo a temperatura máxima desgasta los equipos.
- Evitá las corrientes de aire que entran por puertas y ventanas, colocando burletes y cerramientos adecuados para mantener la temperatura.
- En días de verano, utilizá al máximo las posibilidades de ventilación natural y enfriamiento estructural nocturno, para disminuir el consumo eléctrico para refrigeración.
Lavarropa y secarropa
- En lo posible, intentá lavar siempre la máxima cantidad de ropa indicada por el fabricante del lavarropa. Lavar pocas prendas consume la misma cantidad de energía que lavar a carga máxima. Lo mismo con el secarropa al momento de secar.
- Salvo que la ropa esté muy sucia y se requiera emplear agua caliente, procurá lavar siempre con agua fría o a baja temperatura.
Plancha
- Acumulá la mayor cantidad de ropa para plancharla de una sola vez.
Lavavajilla
- Utilizá el lavavajillas en los programas económicos o de baja temperatura.
Aislación
- En invierno dejá las cortinas y persianas abiertas durante el día para aprovechar el calor del sol. Cerralas al ponerse el sol, de esta manera, el calor acumulado durante el día se mantendrá en el ambiente.
- Para evitar las pérdidas de calor o frío, podés emplear métodos sencillos y baratos como colocar burletes en las aberturas de tu casa (puertas y ventanas).
- En verano, mantené tu casa bien cerrada durante el día para impedir el ingreso de calor y humedad.
Etiquetado Clase A
- Al adquirir un nuevo electrodoméstico, preferí los que sean Clase A. Los equipos Clase A son los que consumen menos energía, por ende, ahorran más.
Fuente: https://portal.ute.com.uy/clientes/soluciones-para-el-hogar/beneficios/tips-de-ahorro